Carrete sub 20
La sub 20 está sacando la cara por el fútbol chileno, que para mucha gente en realidad es lo mismo que Chile.
¿Por qué será que los futbolistas jóvenes juegan mejor y se echan a perder cuando envejecen? ¿Será que las modelos que se agarran y las discos que frecuentan después de cumplir 20 están pagadas con plata del fútbol de otros países?
Hay que hacer algo al respecto. Tal vez tomar a las mismas modelos y a las mismas discos y pagarles para que les enseñen los placeres de la vida a estos chicos antes de la edad fatídica en que se convierten en troncos malos para la pelota. Así no se toman el éxito profesional como una oportunidad para desquitarse de sus penurias de juventud y pobreza revolcándose entre ron y silicona.
Fiorella, esa gran emprendedora chilena, podría armarse algo inspirado en Pantaleón y las visitadoras para llevar el carrete a las divisiones inferiores del fútbol. Así, los cabros lo van a pasar bien y puede que no jueguen al nivel de ahora, pero al menos cuando crezcan ya van a haber tenido su cuota de carrete y se van a concentrar en la cancha.
Es tan corta la carrera del futbolista, ¿no? Para hacerla bien, los chicos tienen que carretear antes, ponerse serios después y luego disfrutar de un retiro donde podrían cerrar el Platinum sólo para ellos, si les gusta la idea. Como va la cosa, la generación Pinilla difícilmente podrá hacerlo a los treinta y tantos.
Si queremos que no se nos echen a perder después estos cabros de la sub 20, mejor les subsidiamos el carrete ahora.
¿Por qué será que los futbolistas jóvenes juegan mejor y se echan a perder cuando envejecen? ¿Será que las modelos que se agarran y las discos que frecuentan después de cumplir 20 están pagadas con plata del fútbol de otros países?
Hay que hacer algo al respecto. Tal vez tomar a las mismas modelos y a las mismas discos y pagarles para que les enseñen los placeres de la vida a estos chicos antes de la edad fatídica en que se convierten en troncos malos para la pelota. Así no se toman el éxito profesional como una oportunidad para desquitarse de sus penurias de juventud y pobreza revolcándose entre ron y silicona.
Fiorella, esa gran emprendedora chilena, podría armarse algo inspirado en Pantaleón y las visitadoras para llevar el carrete a las divisiones inferiores del fútbol. Así, los cabros lo van a pasar bien y puede que no jueguen al nivel de ahora, pero al menos cuando crezcan ya van a haber tenido su cuota de carrete y se van a concentrar en la cancha.
Es tan corta la carrera del futbolista, ¿no? Para hacerla bien, los chicos tienen que carretear antes, ponerse serios después y luego disfrutar de un retiro donde podrían cerrar el Platinum sólo para ellos, si les gusta la idea. Como va la cosa, la generación Pinilla difícilmente podrá hacerlo a los treinta y tantos.
Si queremos que no se nos echen a perder después estos cabros de la sub 20, mejor les subsidiamos el carrete ahora.
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