Perdidos en el espacio
El turismo espacial ya está completamente lanzado. Hoy se cumple un nuevo aniversario del día en que el ruso Yuri Gagarin se convirtiera en el primer ser humano en el espacio, mientras tanto, un ricachón con mega morlacos se relaja en la estación espacial internacional junto a astronautas profesionales.
Bill Gates está muy atento a la suerte de este caballero, porque quiere ser el siguiente en la incipiente lista de gente aburrida de tener vacaciones en la tierra. Mientras tanto, acá en la superficie del planeta, por ahí por la latitud 33 sur, una ciudad vive su propia Odisea del Despacio con su sistema de transporte público, un sistema que fue incluso capaz de burlar la intuición de la líder de unos quince millones de terrícolas. Viendo lo apretados que van algunos de estos humanos, también viene bien el título de Odisea del Espacio.
La gente que gana plata con los colegios piensa que los que escribieron la nueva Ley General de Educación son marcianos. Los que piensan que necesariamente hay que ganar plata educando chilenos también parecen de otro planeta o para allá habría que mandarlos. También es un poco extraterrestre el sistema electoral de esta parte del globo terráqueo: por alguna característica especial del campo gravitatorio de esta región, con un tercio de los votos se puede ganar la mitad de los cupos en el parlamento.
Uno de los homo chilensis más populares por estos días es un ejemplar joven con peinado aerodinámico que, al parecer, vino del futuro a salvar el prestigio de la dinastía Lagos o Lakes, como se le conoce en el siglo 22, de una jueza que estaba escarbando demasiado a algunos ancestros de funcionarios de la dinastía que se pusieron creativos con el erario, que es como se le decía en este siglo 21 a las platas de la base espacial andina.
Mientras, unidades androides femeninas con delantera reforzada en silicona se disputan la aparición en los monitores de los habitantes de esta poluida región. Al parecer, su líder está por estos días en mantención luego de un desperfecto sufrido por el robot programado para manejar su carrera, con el que lamentablemente esta androide terminó casada.
Diversos técnicos trabajan en reconstruir su cuerpo, eliminando cualquier peligroso atisbo de humanidad. Pero de que va a quedar rica, va a quedar rica. Eso dicen.
Bill Gates está muy atento a la suerte de este caballero, porque quiere ser el siguiente en la incipiente lista de gente aburrida de tener vacaciones en la tierra. Mientras tanto, acá en la superficie del planeta, por ahí por la latitud 33 sur, una ciudad vive su propia Odisea del Despacio con su sistema de transporte público, un sistema que fue incluso capaz de burlar la intuición de la líder de unos quince millones de terrícolas. Viendo lo apretados que van algunos de estos humanos, también viene bien el título de Odisea del Espacio.
La gente que gana plata con los colegios piensa que los que escribieron la nueva Ley General de Educación son marcianos. Los que piensan que necesariamente hay que ganar plata educando chilenos también parecen de otro planeta o para allá habría que mandarlos. También es un poco extraterrestre el sistema electoral de esta parte del globo terráqueo: por alguna característica especial del campo gravitatorio de esta región, con un tercio de los votos se puede ganar la mitad de los cupos en el parlamento.
Uno de los homo chilensis más populares por estos días es un ejemplar joven con peinado aerodinámico que, al parecer, vino del futuro a salvar el prestigio de la dinastía Lagos o Lakes, como se le conoce en el siglo 22, de una jueza que estaba escarbando demasiado a algunos ancestros de funcionarios de la dinastía que se pusieron creativos con el erario, que es como se le decía en este siglo 21 a las platas de la base espacial andina.
Mientras, unidades androides femeninas con delantera reforzada en silicona se disputan la aparición en los monitores de los habitantes de esta poluida región. Al parecer, su líder está por estos días en mantención luego de un desperfecto sufrido por el robot programado para manejar su carrera, con el que lamentablemente esta androide terminó casada.
Diversos técnicos trabajan en reconstruir su cuerpo, eliminando cualquier peligroso atisbo de humanidad. Pero de que va a quedar rica, va a quedar rica. Eso dicen.
posted by Sergio Fortuño at 2:28 PM
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