Pilas por un mundo mejor
Justo hoy se nubla, después de esos días en que hubo que hacer las compras y los preparativos navideños bajo un cara de gallo inclemente.
Estas fechas se dan también para esos despropósitos. Como cuando recibes regalos que te tienen todo el 25 desarmando cajas, desenrollando alambritos, leyendo manuales, atornillando y desatornillando, todo para darte cuenta recién al final de que no tienes pilas para echar a andar esa nueva maravilla de la juguetería o la electrónica.
Así que partes a comprar. Tal vez dejas en la casa a un cabro chico más ansioso que gay celoso por estrenar sus juguetes.
Pero se te olvidó algo. Es navidad y está todo cerrado.
En fin. Animo. Qué le vamos a hacer. Sólo podemos hacer un llamado para que nadie deje hoy de pasar por sus pilas.
Estas fechas se dan también para esos despropósitos. Como cuando recibes regalos que te tienen todo el 25 desarmando cajas, desenrollando alambritos, leyendo manuales, atornillando y desatornillando, todo para darte cuenta recién al final de que no tienes pilas para echar a andar esa nueva maravilla de la juguetería o la electrónica.
Así que partes a comprar. Tal vez dejas en la casa a un cabro chico más ansioso que gay celoso por estrenar sus juguetes.
Pero se te olvidó algo. Es navidad y está todo cerrado.
En fin. Animo. Qué le vamos a hacer. Sólo podemos hacer un llamado para que nadie deje hoy de pasar por sus pilas.